El sector literario no se ha quedado al margen de la inmersión de las artes en el mundo digital, la web 3.0 y el metaverso. De una forma tímida pero cada vez más segura, son varias las iniciativas que están despuntando en este área. Creatokia, por ejemplo, es una plataforma habilitada para crear propiedad digital para editores/as, autores/as y lectores/as y en alianza con ella, la editorial Deusto de Grupo Planeta puso a la venta, 99 ejemplares en formato NFT, de un ensayo de Juan Ramón Rallo, que se agotaron en dos horas; también en colaboración con el sello Penguin Random House Grupo Editorial, han publicado como NFT “Colección invisible” del autor Eloy Moreno.
Otras plataformas interesantes son Alexandria Labs, Readl con su propuesta de acercar el mundo literario a la tecnología blockchain, protegiendo la propiedad intelectual de los creadores y/o la plataforma editorial Linkgua, que se lanzó en España y ha publicado la la colección First Folio: considerados los primeros libros NFT con ISBN.
Son solo algunas muestras de lo que está sucediendo, pero conocerlos y visitarlos nos hace conscientes de las grandes oportunidades que los NFTs y las nuevas tecnologías brindan al mundo del libro.
Acercar la literatura a un público joven que ha nacido en la era digital es también una posibilidad añadida, algunos proyectos ya tienen este objetivo en mente, como NFT Poetry on the Blockchain que explora la forma en que la tecnología blockchain y los NFT pueden ayudar a la poesía. Además, autores consagrados también se unen a estas nuevas formas de literatura, como Arturo Pérez Reverte, que ha publicado un relato inédito, La noche de los aceros, en el Marketplace creado para comercializar obras NFT por Telefónica.
Para quién esté pensando en crear obras de arte literarias NFT, algunas de sus ventajas es la variedad de opciones que pueden generarse, cartas digitales de personajes de la obra, contenidos exclusivos, primeras ediciones limitadas, contenidos o servicios exclusivos brindados por el escritor/a y así un largo etcétera al que solo nuestra imaginación pone límites. Además, permite acercarse y tener una comunicación más directa con la comunidad de lectores/as.
Y algunos otros aspectos deberán ser tenidos en cuenta, ya que los contratos de edición se habrán de adaptar a estas realidades, como ya adelantábamos en otro artículo, está sucediendo en la industria musical, pudiendo aplicarse contratos inteligentes digitalizados que integren directamente el pago de los royalties, cláusulas de cesión de derechos que reflejen la opción de la tecnología Blockchain, etc..
Tampoco se han hecho esperar las primeras contiendas legales al respecto, una de las más conocidas, sucedía en 2022, cuando un grupo crypto denominado Spice DAO compró un ejemplar de un libro sobre Dune de Alejandro Jodorowsky en una subasta por 2,66 millones de dólares, creyendo que le otorgaba los derechos de autor para producir NFT, cuando en realidad compraron simplemente una copia de libro y no, los derechos de propiedad sobre el mismo. En consecuencia, no tenían derecho a reproducirlo y el libro seguía perteneciendo a su autor, con las consiguientes pérdidas económicas que ello les aparejó. De ahí, que la importancia de conocer la propiedad intelectual y los derechos que la misma otorga, sea fundamental en estos casos.
Con todo esto, nos queda reflexionar e ir comprobando hacia donde se dirigirá la edición de libros y cómo se van a gestionar los contratos de estos libros en formato NFT, también será interesante ver si la autopublicación se va a ver favorecida por estos formatos, adquiriendo mayor relevancia en el metaverso. ¿Provocará esto un cambio en los porcentajes actuales de distribución de royalties entre editores/as y autores/as?. Los interrogantes son aún varios.
Lo cierto es que cuando el libro digital llegó a nuestras vidas, muchas personas fueron reacias a su entrada en el mercado y ya entonces, se hablaba, de la desaparición del libro en su versión física en papel, pero nada de esto ha sucedido y ambos formatos conviven a día de hoy sin mayor cuestionamiento. Lo mismo está sucediendo con esta nuevo opción de mercados digitales, donde poder adquirir obras NFT, se convierte poco a poco en una opción más de adquisición de obras literarias, favoreciendo una literatura de acceso libre que permite que nuevos o no tan nuevos autores/as, puedan a través de estos medios encontrar su público.
A nivel legal, los cuestionamientos que se van produciendo en torno al mundo del libro plantean retos interesantes, que nos lleva, igual que en otras disciplinas artísticas, a que cada vez más sea fundamental contar con un apoyo jurídico de protección de los derechos de autor, que permita rentabilizar económicamente las creaciones de un modo seguro y en un entorno confiable, garantizando así que más personas puedan sumarse a la llamada crypto literatura, al mismo tiempo que salvaguardan sus derechos, tanto en el caso de las personas creadoras como de las consumidoras de estos servicios.
Autora: Patricia Bueso
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